Solemos pensar que ser emprendedores digitales es relativamente fácil, y en parte no es mentira, ya que tiene multitud de ventajas, como las que la propia Teresa te cuenta en este fantástico post sobre trabajar como freelance.
Cuando llega a tu vida la brillante idea de ser emprendedor digital y te lo planteas como una forma de vida y de sustento, te surgen piedras en el camino que debes ir sorteando para poder salir a flote.
Los primeros que intentarán convencerte de que no emprendas por tu cuenta e intentes buscar un trabajo “cómodo” por cuenta ajena, será tu propia familia, debido a los riesgos que conlleva emprender profesionalmente sin la seguridad de un sueldo fijo a final de mes.
Si, pese a esto, estás convencido de querer ser freelancer e iniciar tu propio negocio por Internet, deberás tener muy en cuenta los que, en mi opinión, son los 10 peores errores que cometen los emprendedores online. ¡Toma nota!
Cosas que no deberían hacen los Emprendedores Digitales
Si ya eres emprendedor, sabrás que los comienzos son difíciles y que es muy común caer en ciertos errores. Pero no es algo que ocurra sólo en el mundo freelance, muchas empresas con larga trayectoria tropiezan varias veces en la misma piedra.
Por ejemplo, es bastante habitual encontrar marcas que aún no invierten en estrategias de employer branding, o que priman las ventas por encima de la propia imagen, dejando ésta abandonada.
No pasa nada por equivocarse, lo importante es saber cómo remediar estos pequeños problemas. Por eso, te voy a hablar de los 10 errores más comunes en este mundillo y cómo evitarlos.
1. Trabajar con amigos o familiares no cualificados
De entre todos los errores que los emprendedores digitales suelen cometer, he querido hacerte llegar éste en primer lugar (y no por casualidad).
“Cuando comienza cualquier relación, ya sea profesional, sentimental o de cualquier otra índole, debes sentar unas bases o normas básicas, que en ningún momento debes traspasar, y hacérselas entender también a la otra persona.”
Puede que en los inicios de tu emprendimiento online, necesites contar con un equipo de trabajo que abarque todas las áreas a las que vayas a dedicarte.
Por eso, al igual que harían las empresas en el caso de querer contratar nuevo personal, debes hacer una exhaustiva búsqueda y análisis de qué profesionales te convienen más.
Seguro que lo primero que te viene a la cabeza es que, dado que tienes un amigo o familiar que tiene un perfil parecido al que buscas y además está desempleado, podrías contar con él y, de paso, hacerle un favor.
Una cosa es que la relación de trabajo lleve a una amistad con el paso del tiempo, pero que una amistad o vínculo familiar derive en relación profesional así porque sí, no suele llevar nada positivo consigo.
Este es uno de los peores errores que cualquier emprendedor digital puede cometer, ya que esto afectará a tu vida personal y tendrás que lidiar con estos 3 factores que siempre irán en tu contra:
- Dificultad para separar ámbitos: Habrá mayor facilidad por parte de ambos para traspasar la delgada línea entre el “rol profesional” que cada uno contraiga y la relación personal, dada la confianza existente.
- Desgaste de la relación personal: Las rencillas y roces relativos al trabajo que puedan surgir en el día a día, inevitablemente te los llevarás al terreno personal, aún estando en horario no laboral.
- Entorno afectado: Esos roces, en el caso de que el vínculo sea familiar, pueden afectar a otras personas. Por ejemplo, si contratas a tu hermano/a, las rencillas pueden salpicar a tus padres, a tus hijos, y a los demás hermanos que pudiérais tener.
2. Aceptar todo tipo de trabajos
Quizá, como me ocurre a mí, puede ser que te hayas formado en distintas disciplinas del marketing online, como son el SEO, la analítica web, el diseño de páginas web o la profesión del momento; community manager.
Pese a esto, lo más común es que luego os especialicéis en un sector en concreto, bien porque tengas más talento en él o porque veas mayor salida profesional.
“Dada la ilusión desbordante con la que todos comenzamos cuando desarrollamos y ponemos en marcha un proyecto online, somos muy dados a cometer el error de querer “hacer de todo para todos”.”
Por ello, te puede ocurrir que, pese a por ejemplo tener formación en posicionamiento SEO, tu especialidad no sea ni mucho menos esa, y además no te atraiga lo más mínimo, pero de pronto te salga un cliente para que le hagas SEO en su tienda online y te pague bastante bien por ello.
Yo te recomiendo que no te embarques en ello, ya que estarás abocado a realizar un mal servicio, con los consiguientes malos resultados y el descontento final del cliente.
Como alternativa, si no quieres dejar pasar esta oportunidad, te recomiendo que subcontrates a un buen consultor en posicionamiento SEO, que pueda desempeñar por ti esta tarea.
3. No hacer Networking con otros profesionales
Pese a que esto del Networking ya te lo hayan repetido hasta la saciedad, no está de más recordar su importancia.
“Todos los emprendedores digitales necesitan unas herramientas y habilidades que les ayuden a acelerar el proceso de crecimiento del negocio o proyecto.”
Para ello, no debes aislaerte y estar todo el día planificando aspectos técnicos de tu negocio en tu despacho o habitación, en solitario con tu ordenador.
Siempre te vendrá bien ir a eventos, congresos y otro tipo de citas que puedan acontecer en tu ciudad (o fuera de ella) y que tengan estrecha relación con tu nicho de negocio.
En estos eventos podrás conocer a profesionales de tu sector y desvirtualizar a otros que ya conozcas a través de las redes sociales o hayas oído sobre ellos.
Esto hará que tu personal branding mejore y, por ende, también la de tu negocio online.
Además, es muy interesante este tipo de relaciones, ya que de aquí puedes sacar interesantes colaboraciones y sinergias, las cuales podrás emplearlas igualmente para el crecimiento de tu negocio.
Sin duda, también acudirán a este tipo de eventos personas que no tengan conocimientos del sector y estén buscando profesionales (como por ejemplo tú) que les ayuden a implementar técnicas digitales en su negocio.
4. Ser emprendedores digitales de “marca blanca”
Cuando queremos comenzar con nuestro emprendimiento digital, normalmente oteamos el horizonte y, dentro de nuestros conocimientos y formación, en la mayoría de los casos elegimos un nicho que ya esté dando buenos resultados a otros emprendedores.
Es obvio pensar que, si a la mayoría de los profesionales que han iniciado un proyecto en un determinado sector o nicho de mercado les va bien y están obteniendo bastante beneficio por ello, no sea por casualidad.
Este el caso del marketing online, que hoy en día está muy en alza dada la necesidad de tener presencia en Internet y conocer herramientas social media.
Podemos caer en la tentación de sumarnos al carro de este éxito (si quieres, puedes llamarle “moda”) y emprender en éste u otro sector muy masificado.
“Pasarás a ser, muy probablemente “uno más”, al menos durante tus primeros años de emprendimiento online, ya que otros que lleven varios años en ello, te llevarán ventaja.”
En definitiva, siempre (pero siempre) debes procurar que tu idea de negocio aporte un plus que otros no aporten, o lo que es lo mismo, solucionar un problema que hasta el momento no haya solucionado nadie, para así conseguir diferenciarte.
5. Elegir un nicho demasiado rebuscado
En el extremo opuesto al error anterior, se encuentra la idea de elegir un sector para emprender de manera online en el que aún no lo haya hecho nadie antes.
Con esto no te quiero decir que crear un negocio que antes no lo haya creado nadie sea negativo. ¡Al contrario!
Lo que sí debes pensar es que este puede ser un arma de doble filo, ya que tener la brillante idea de crear algo nuevo jamás visto puede ser el mayor “pelotazo” de los últimos tiempos en tu sector y convertirte en el nuevo Mark Zuckerberg o Steve Jobs.
“Puede ocurrir que sea una idea tan loca e inverosímil, que al final tengas que abandonarla, con la consiguiente pérdida económica y moral.”
Por ello, deberás estudiar muy a fondo esta posibilidad y probar si tu idea de emprendimiento aportará valor real y será de utilidad para otros.
6. Acabar trabajando 24h al día, 7 días a la semana
Este quizás sea uno de los errores más frecuentes de todo emprendedor, tanto digitales como no digitales.
Está claro que si eres emprendedor digital y quieres sacar adelante tu propio negocio online (sobre todo al principio), deberás dedicar infinidad de horas.
Pero una vez asentado ese modelo de negocio, y cuando compruebes que está dando sus frutos, deberás plantearte una estabilidad en cuanto a horarios y establecer tus propias normas de trabajo.
Si como profesional freelance trabajas para varios clientes, debido a que les estás prestando tus servicios de manera no presencial, puede ocurrir que alguno de éstos tenga la necesidad de querer sentirte cerca y saber que estás trabajando para sus intereses.
Por tanto, te pueden estar llamando y contactando a horas intempestivas del día o en fines de semana.
“Deberás acordar con los clientes unos horarios y hacerles ver que además de profesionales, eres persona.”
Además de organizar el trabajo con los clientes, es muy útil contar con una serie de herramientas para mejorar la productividad que te ayudarán a ser más eficiente.
7. Dejar de formarse porque el negocio vaya “viento en popa”
Una vez iniciada tu actividad como emprendedor digital, habrás dejado atrás una época en la que habrás invertido mucho tiempo y dinero en formarte, con multitud de cursos, asistencia a congresos o incluso másters.
Habrá sido una época en la que seguramente también reinaba la incertidumbre y el caos por no saber si tu idea iría a buen puerto.
Siguiendo con el símil marinero,… si actualmente tu proyecto online va viento en popa y estás obteniendo beneficios y creciendo cada vez más, no será precisamente el momento de relajarse.
Me explico; como sabes, el mundo digital es muy cambiante, y lo que hoy funciona, mañana probablemente no.
Por tanto, mi consejo es que no pares ni un solo momento de aprender nuevas técnicas, trucos, experimentos, etc. Dicen que el llegar a la cima cuesta, pero mantenerse cuesta más aún.
Es por ello por lo que muchas start-ups digitales echan el cierre. Creen que cuando alcanzan un momento brillante, ya todo está hecho.
«Renovarse o morir. Es decir, o te adaptas a los tiempos y cambias con ellos, o estás destinado a morir en el olvido.”
El propio Google es el primero que se está renovando día tras día, haciendo su algoritmo cada vez más sólido. Y mirad lo bien que les va…
8. No tener una Marca Personal
“Muchos emprendedores digitales cometen el error de comenzar con su proyecto online, olvidándose de su propia marca personal.”
Si tu eres de los que piensan así, puedes afirmar que para qué vas a seguir trabajando tu marca, si al fin y al cabo lo que te da de comer es tu proyecto, y por ende, tus clientes ¿no es así?
En parte es cierto, pero imagínate que algunos de esos actuales clientes te fallan y dejan de serlo.
Siguiendo el ciclo, tendrás que buscar nuevos clientes…
Déjame decirte que, hoy en día, la persona que tenga un negocio y quiera contratar profesionales para llevar a cabo cualquier tarea del ámbito digital, se va a fijar mucho en tu presencia en Internet, lo que otros opinan sobre ti o, en definitiva, tu marca personal.
“Tu propia marca será tu mejor currículum y la mejor manera de que consigas aumentar tu cartera de clientes si eres emprendedor online.”
9. No tener una vía de escape o desahogo
Cuando digo vía de escape, me refiero a tener momentos del día en que la cabeza (y el cuerpo) se desvinculen por completo de la actividad de emprendimiento digital que estés planeando.
Tareas tan cotidianas como preparar la comida del día siguiente, salir a correr, al gimnasio o un rato a tomarnos algo con amigos o familiares, harán que nuestra cabeza descanse durante un rato del agotador trabajo de ser emprendedor.
Además, te contaré un secreto (ahora que no nos lee nadie…); hay investigaciones que demuestran que la mente humana se vuelve mucho más creativa y maleable en momentos en los que se encuentra más relajada, como por ejemplo, haciendo deporte o tomando una cerveza entre risas.
10. Pretender no cometer ningún error
Y hablando de errores… este es uno muy común que cometen casi todos los emprendedores o, ¡mejor!, me vas a permitir que me incluya y diré “cometemos”.
El caso es que, como es lógico, cuando comenzamos a dar forma a nuestro proyecto, vamos con pies de plomo en todos los pasos que vamos dando para no equivocarnos. Antes lo decimos y… ¡zas!, antes nos equivocamos.
El caso es que todo emprendimiento es una lucha constante contra la incertidumbre y donde deberás realizar cientos de “test A/B” para al final dar con la fórmula correcta.
Por eso, deberás comprender que (hasta cierto punto) cometer errores a veces es positivo, siempre y cuando aprendamos de ellos para no volver a cometerlos.
Piensa que hasta los mayores referentes que hoy triunfan, han cometido errores, que han utilizado en su favor para levantarse y, al final, llegar a estar donde están hoy.
¿Cuáles son para ti los peores errores que pueden cometer los emprendedores digitales?, ¿qué consejos añadirías tú para alguien que quiere lanzarse en Internet?
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