Por qué NO despega tu Estrategia Social Media

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Casi todos sabemos que el paso del tiempo y la falta de resultados pueden llegar a desmotivar a cualquier persona, principalmente si hemos trabajado e invertido gran parte de nuestro tiempo y presupuesto en algún nuevo proyecto o estrategia social media.

Como no podía ser de otra manera, las redes sociales tampoco se logran quedar fuera de esta afirmación.

Cuando nuestra estrategia social media no consigue despegar, y por ello no nos aporta los resultados que más o menos esperábamos obtener, nuestra motivación cae irremediablemente en picado, haciendo que todo nuestro trabajo sea aún más complicado.

«Porque sin estar lo suficientemente automotivados, cualquier cosa que realicemos corre el riego de convertirse en toda una verdadera carga.»

Es quizás por ésta razón, que evaluar y detectar lo que podría no estar funcionando en nuestros perfiles o páginas sociales para conseguir reorientar o corregir a tiempo nuestras estrategias, es sin duda un factor que marcará la diferencia entre el futuro éxito o fracaso de nuestra empresa en redes sociales.

Motivos por los que tu estrategia SM puede no funcionar

No obstante, no deberíamos olvidar que también hay muchos otros parámetros importantes que afectan directa e indirectamente a la conclusión de nuestros diferentes objetivos online…

Por ello, y en esta ocasión, me gustaría que los veamos juntos:

1. No conocemos bien las particularidades de la empresa

Si no conocemos adecuadamente las instalaciones y los diferentes productos y servicios que ofrece nuestra marca, además de sus puntos fuertes y débiles más significativos, no seremos capaces de interactuar correctamente con nuestra audiencia (ni de dar a conocer el negocio o plasmar su filosofía en las publicaciones o mensajes que realicemos).

2. No tenemos +/- claro cuál es nuestro Target

Hay cientos de millones de usuarios activos en redes sociales. Por ello, es muy importante orientar nuestra estrategia social media marketing hacia la audiencia que pudiera estar más interesada en nuestro negocio o que tenga algunas necesidades básicas que nuestros productos y servicios logren satisfacer.

-> Leer: ¿Cómo identificar mi público objetivo en internet?

Este es el punto más significativo a la hora de diseñar una estrategia de contenido para nuestras publicaciones en redes sociales, porque estas deberían ser lo suficientemente atractivas como para captar la atención del cliente ideal de nuestra empresa.

3. No hemos seleccionado correctamente las plataformas

Nuestra audiencia ideal (o target), ¿dónde está? Los actuales y potenciales clientes de nuestros establecimientos suelen tener sus plataformas favoritas.

Conocer las características, estadísticas y tendencias más importantes de las diferentes redes (como el estilo de usuarios que mayoritariamente poseen), nos puede ayudar a decidir hacia dónde dirigir la mayor parte de nuestros esfuerzos y acciones (factor indispensable para obtener un mejor retorno de la inversión en social media).

4. No contamos con el apoyo de toda la empresa

No tener el suficiente apoyo y respaldo de toda la empresa en su conjunto (el propietario, los directivos, y la platilla en general) hará que todo lo que edifiquemos en la red se pueda venir abajo en el mundo real por no contar con unos cimientos firmes.

Esta es una de las razones por las que nuestra estrategia de rrss debe estar en comunión con las demás estrategias empresariales.

5. Nadie asume esta gestión a tiempo completo

El no tener a un profesional trabajando a tiempo completo en estas tareas, suele hacer fracasar a muchas estrategias. Contar con una agencia de publicidad y marketing externa, o un Community Manager en plantilla, puede ser la opción más inteligente para algunas medianas empresas.

Pero este es un tema complicado, porque depende principalmente del tamaño real de la misma, de la cantidad de personal y, sobre todo, del presupuesto del que se disponga para estos temas.

Otro posible escenario: Es muy habitual que un miembro del personal asuma la tarea de gestionar las plataformas sociales de la empresa. En estos casos habría que tener en cuenta que es necesario (como mínimo) disponer de un asesor o consultor profesional que de formación a nuestros empleados y que también nos ayude a diseñar la estrategia de social media. Además, dependiendo del volumen de nuestra comunidad social y de la cantidad de plataformas que manejemos, sería conveniente que esa persona se dedique casi en exclusiva a dichas funciones.

6. No hay unos objetivos suficientemente claros

Quizás puede parecer obvio, pero no tener suficientemente claro cuáles son los objetivos de nuestra marca en Internet, influirá de manera muy negativa en todas nuestras estrategias online.

¿Por qué queremos estar en redes sociales?, ¿cómo buscamos dar a conocer nuestra marca en la red?, ¿cuál es el objetivo final de nuestra empresa en Internet?, ¿dónde buscamos nuevos clientes?, ¿cómo intentaremos fidelizar a nuestros actuales clientes?

Estas son solo algunas de las preguntas que deberíamos tener más o menos resueltas antes de embarcarnos en una planificación a mediano o largo plazo en Internet.

7. No nos hemos preocupado por mantenernos al día

Es un hecho que el entorno online actual cambia muy rápidamente, y como no podía ser de otra manera, las diferentes plataformas sociales también evolucionan sus políticas, algoritmos, herramientas, funciones, etc. paralelamente… Es decir, que lo que ayer parecía funcionar perfectamente, hoy quizás no lo haga tan bien.

Por ejemplo: Facebook y Twitter, dos de las plataformas más populares del momento, están sufriendo recortes en su visibilidad orgánica e implementado nuevos modelos de publicidad social, que si no son tenidas en cuenta por las marcas, trastocarán los buenos resultados que venían obteniendo en ellas. Este es el motivo por el cual es tan importante ser más profesional y estar siempre al día de lo que se cuece en temas de social media (capacitándonos e investigando las evoluciones de este entorno online, para poder ir actualizando nuestros conocimientos y estrategias).

8. Nuestro mensaje no despierta interés

El contenido no es interesante: Debemos pensar cómo atraer y motivar a nuestra audiencia y, sobre todo, no centrar el mensaje sólo en nuestra empresa (autopromoción). Lo que decís o compartís debe ser relevante para vuestros fans y seguidores, o como mínimo despertar su curiosidad. Sí no tenemos una estrategia clara de contenidos y hacemos lo mismo que los demás, a la larga aburriremos a nuestra audiencia.

Nuestras imágenes y vídeos no son de calidad: Está demostrado que las imágenes generan mayor viralidad en redes sociales que cualquier otro tipo de contenido. Por eso, es importante disponer de fotografías, infografías y vídeos de buena calidad y que puedan evocar emociones en nuestra audiencia (recuerda; en redes sociales no estamos vendiendo productos, sino que “estamos vendiendo sensaciones”).

9. No disponemos de un blog o web en óptimas condiciones

Al llegar hasta este punto, creo obligatorio recomendarte que tengas un especial cuidado con ofrecer una web eficaz y diseño de calidad. Principalmente, porque una web poco profesional, de mala calidad, muy poco intuitiva (usabilidad), no adaptada al mundo móvil, que demore mucho tiempo en cargar, etc., es muy perjudicial, tanto para cualquier estrategia en redes como para tu imagen y reputación institucional (porque ello es tu casa en Internet).

10. No utilizamos las herramientas adecuadas

Hay gran variedad de herramientas que nos pueden facilitar la vida en redes sociales (automatizar, programar, analizar, evaluar, etc.). El no utilizar las apropiadas para cada red y necesidad, podría ser un obstáculo para nuestros objetivos.

De la misma manera, el abusar de ellas o automatizar demasiado nuestros perfiles, nos hará parecer una maquina y nos trasformará en una marca más distante y poco natural (perdiendo la faceta social que nos aporta cualquier plataforma).

11. No analizamos y evaluamos regularmente nuestros resultados

Si hay algo que no está funcionando como se esperaba, ¿cómo lo sabemos? Relacionado con el punto anterior, las herramientas en redes sociales también nos facilitan el tema de la analítica y obtención de datos relevantes sobre nuestra actividad social…

Una de las razones más comunes por las que termina fracasando una estrategia en redes sociales es no tener datos ni conocimientos reales de lo que estaba y está funcionando o no.

12. No tenemos paciencia ni somos constantes

Para finalizar, me gustaría recordarte que debemos entender que éste no es un trabajo de unos cuantos días.

Tanto la presencia de nuestra empresa en redes como sus otras estrategias de marketing en Internet, simplemente requieren de un tiempo lo suficientemente importante como para conseguir madurar y proporcionar algunos frutos significativos.

CONCLUSIÓN:

Diseñar y gestionar una presencia en redes sociales que pueda llegar a ser lo suficientemente atractiva como para apartarnos algunos beneficios claros, es un trabajo que necesita de una adecuada formación, de una mínima inversión y de una correcta planificación.

Por otro lado, el utilizar el sentido común e intentar no cometer (en mayor o menor grado) ninguno de los errores anteriormente mencionados, logrará fortalecer todo vuestro trabajo en Internet y hará despegar las estrategias social media.

Porque como siempre suelo decir…«este no es un trabajo fácil, pero tampoco tiene por qué ser demasiado complicado».

¿Qué otros motivos conoces por los que pueda fracasar una estrategia en redes sociales?

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About Author

José es Consultor en hotelería especializado en marketing online. En su blog escribe sobre Marketing, Social Media y técnicas de Blogging. Aunque su actividad gira en torno al sector turístico, también asesora a empresas de otros nichos que intentan mejorar sus estrategias online.

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